Esto eran dos chavales. Dos buenos amigos, desde hace ya.. buff.. muchos años, nadie sabe cuantos. Uno con gafas, bien vestido, inusual para su estilo, con una mochila y feliz y desplegando energía como siempre. El otro, mucho más guapo, vestido moderno, quizá demasiado moderno, cargando un trípode y una cámara, sonriendo gracias a la energía de su amigo.
Llegan a la vía del tren, tiran las cosas a un lado, cerca de un poste kilométrico y sacan la cámara. Uno posa haciendo tonterías tumbado en la vía muerta, dándole al otro la idea de grabar un videoclip. Puede que esa fuera la idea ganadora de un premio. Se tumba con la cámara pegada en la cabeza del primero y empieza a arrastrase hacia atrás. La idea es épicamente buena.
Mientras estos personajes hacen el chorra, un maquinista loco empieza su turno en el tren. Lo siento chicos.
Reyerta Sagaz 